lunes, 18 de junio de 2012

Ánimo "parapléjico"

El nombre de esta entrada me lo sugirió la pasada semana una paciente mayor que estando, ciertamente, desorientada y, ligeramente, deprimida, hizo un juego de palabras con el resultado de esta expresión tan acertada.

Parece lógico pensar que si uno se queda parapléjico, el ánimo se vea afectado y resulte "parapléjico" o, su equivalente, deprimido.

La depresión ha sido, sin duda, la variable psicológica más estudiada en la lesión medular. Tratados y publicaciones nos hablan de ella como si , irremediablemente, todo el mundo tuviera que deprimirse tras sufrir la lesión.

De hecho, se piensa que cuando un l.m. no se deprime se debe a su ignorancia o falta de ubicación en la lesión y sus consecuencias. La desorientación de la paciente a la que me refiero en esta entrada es también un fenómeno frecuente, especialmente en los mayores a los que la hospitalización y el hecho de enfermar los "descoloca" por completo y les hace perder sus referencias.

Las personas que permanecen sedadas o en coma inducido mucho tiempo se desorientan de igual manera, independientemente de la edad.

En algunos l.m. esta fase se prolonga más de lo "normal" lo que hace que la familia sufra y se resienta temiendo que el paciente no recupere su funcionamiento cognitivo previo. La ventaja que este episodio delirante puede tener, a posteriori, es el hecho de que la familia minimice las secuelas de tipo motor o sensitivo del lesionado al valorar como más relevante la recuperación del nivel de conciencia y que no queden secuelas neurológicas.

Tras la recuperación del funcionamiento mental previo, los pacientes no recuerdan, en la mayoría de los casos, nada de lo sucedido. Algunos, de manera excepcional, si reviven hasta avanzada la rehabilitación un recuerdo desagradable de los episodios delirantes por los que pasaron en la fase aguda.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Nosotros revivíamos los episodios delirantes si como un recuerdo desagradable pero no de manera excepcional, no se si era por los pacientes de mi planta o por la casualidad,pero alguna vez nos reuníamos todos y contábamos alguna experiencia "paranormal" que vivimos en las diferentes UCI's por las que pasamos cuando estabamos en la fase aguda. Yo en broma decía que había comprobado que yo no servía para yonki porque me sentaban mal las "drogas".
Por ello pienso que tan mala es la depresión (las situaciones son muy jodidas) como las "drogas" que se utilizan para inhibirla (que son jodidas y además enganchan).
Cuando me enteré que volvia a casa, hablé con el doctor y le dije: "por favor reviseme las pastillas que quiero irme de aqui limpia" jejeje
Belisa

Afrontando la lesión medular dijo...

Es verdad, Belisa, que los pacientes que sufren una l.m. se les "carga" de mucha medicación, una más justificada que otra. Se tiende a dar antidepresivos por sistema considerando que el trauma es grande y que el paciente, cuando tome conciencia, se "vendrá abajo". También es verdad que algunos de esos fármacos crean dependencia y hay que vigilar.

Justo al alta no se debe de suspender el tratamiento porque el alta es otro importante proceso de estrés por sí solo y lo correcto es que se haga un seguimiento durante la rehabilitación y retirarlos progresivamnete cuando no se precisen y, si el alta está encima, es mejor que el paciente sea revisado en su hopital de referencia.